Diccionario de Autoridades - Tomo I (1726)

ASPID. s. m. Espécie de serpiente pequéña, la qual divíden los naturáles en tres géneros, Cherséa, Chelidónia y Ptyada: llamóse la primera Cherséa, que quiere decir terrestre, porque la mayor parte del año está debaxo de tierra: la segunda se llamó Chelidónia, que significa golondrinéra, porque por los lomos es negra, y por el vientre blanca como la golondrína: la tercera Ptyada se llamó assi de su naturál costumbre, porque quando quiere ofender, alzando el cuello, y midiendo la distáncia, desde lejos escúpe el veneno, con el qual de improviso inficiona y corrompe al hombre ò animál que toca: es de colór verde claro. La mordedúra de qualquiera espécie de estas no es mayor que la picadúra de una agúja; pero no por esso dexa de acarrear gravissimos y mortáles accidentes. Hace comunmente dos herídas el macho, y quatro la hembra, porque tiene dientes doblados como la vívora. Sienten los mordidos del áspid grandissimo estupór y entorpecimiento de miembros, frialdád notable, temblór de labios y de palabras, torcimiento de cuello, profundissimo sueño, tras del qual sigue el pasmo universál y la muerte. Viene del Latino Aspis, que significa esto mismo. LAG. Diosc. lib. 6. cap. 53. Hállanse tres espécies mortíferas de áspides. ALFAR. fol. 224. Como áspid mata con un sabroso sueño.