Diccionario de Autoridades - Tomo II (1729)CODO REAL. El que tiene de altúra tres dedos mäs que el ordinario. Trahenle Covarr. en su Thesoro, [ii.395] y Nebrixa en su Vocabulario.
Dar del
codo. Es avisar al que está cercáno, y advertirle secretamente de algúna cosa, tocandole recatadamente con el codo. Lat.
Vellere alicui aurem. GUEV. M. A. lib. 2. cap. 16. Yo le enxugué las lágrymas de la cara, y le
dí del codo, y le rogué al oído no procediesse mäs en la matéria. GRAC. Mor. fol. 156. Aristómenes, Maestro de Ptoloméo, le despertaba y
daba del codo, porque se dormía quando estaba dando audiéncia à los Embaxadóres.
Dar del
codo. Vale tambien despreciar à algúno y apartarlo, y lo mismo que Darle de mano. Lat.
Ab se aliquem repellere. ESPIN. Rim. fol. 30.
Envidia es ocasion que no se estíme
Al virtuoso, y que le dén del codo,
Y que olvidado à la paréd se arrime.
Del
codo à la mano. Locucion para significar que algúna persóna es sumamente pequéña ù de baxa estatúra, por alusion à la medida común de un codo, que consta de la distancia que hai de este à la mano. Lat.
Exigua cuiusvis rei longitudo, velut ea quae à cubito ad manum interjacet. PIC. JUST. fol. 36. Era pequéño, no mayór que
del codo à la mano.
Hablar por los codos. Phrase vulgár con que se pondéra, y exagéra, que algúno habla mucho. Lat.
Perenni ac profluente loquacitate obstrepere.
Levantar de
codo. Phrase con que se dá à entender que algúno bebe mucho vino, ò que está borracho por haverle bebido. Lat.
Elatis ulnis exsiccare pocula.
Metido hasta los
codos. Es estár empeñado ò embebido en la consecucion de algúna cosa, con la mayór eficacia, y aplicacion. Lat.
Quopiam negotio irretiri, implicari. FONSEC. Vid. de Christ. tom. 2. cap. 15. Comenzaré de un Mathéo,
metido hasta los codos en el dinéro. CERV. Quix. tom. 1. cap. 8. Aquí (dixo en viendole Don Quixóte) podémos, hermano Sancho Panza,
meter las manos hasta los codos, en esto que llaman aventúras. OV. Hist. Chil. pl. 149. Estando el Adelantado Almagro con las armas en las manos, y
metido hasta los codos en las batallas, y refriegas con los Indios, llegó Rodrigo Ordoñez.
El ojo límpiale con el
codo. Refr. que advierte lo peligroso que es tocar al ojo con la mano, ni con otra cosa, quando está alterado con algun corrimiento ù otro accidente: y enséña, que las cosas de que puede resultar ò sobrevenir daño ò perjuício à otros, no se deben mover, tocar, ni excitar. Lat.
Aegrum fricare desine digitis lumen:
Quin parte cubiti potius impiger tangas.